Ser o no ser?, esa, esa es la pregunta.
No todo está escrito, la verdad está afuera.
Hace tiempo creí en que todo estaba escrito y que las estrellas y las líneas de la mano decían el destino.
Ahora sé que lo que se decida hacer no va ligado a una constelación o una vena en la mano, o como hemos sido hasta el día de ayer, cada uno es arquitecto de su propio destino, día a día vamos construyendo ese no destino sino ese legado, la verdad está afuera de lo que uno cree y eso muchas veces es buscando dentro de uno mismo.
El jueves fue la despedida del buen Rola y antes de que él llegara me di cuenta por una frase de mi buen amigo Toño de que los límites nos los ponemos nosotros mismos y que aquello que nos daba «güeva», temor, indiferencia, es lo ahora nos hace sentir muy bien.
Bien por ti Toño, el haber convertido un prospecto en un negocio y la satisfacción que eso te brindo es lo mejor.
Hoy es el momento de no ser y empezar a ser, no dejar que la historia nos forme el presente y el futuro.